miércoles, 25 de abril de 2012
DÍA DE LA MUJER
El 8 de marzo se conmemoró en el centro el día de la mujer .
- Concurso de carteles alusivos.
- Confección de murales
- Trabajo en clase de un dossier sobre este día.
1º PREMIO CONCURSO DE CARTELES
.
- Concurso de carteles alusivos.
- Confección de murales
- Trabajo en clase de un dossier sobre este día.
1º PREMIO CONCURSO DE CARTELES
.
Concurso de cuentos
Diseño y construcción de la 1ª falla en el IES La Coma
1º CONCURSO DE CUENTOS BREVES
1º Premio
Autora: Laura Fernández Jiménez
1º A -IES La Coma
CUENTO EL TOMATITO TRAVIESO
Érase una vez un tomatito muy travieso que vivía en una cesta con muchos tomates.
Un día le dijeron sus amigos que iba a llegar un nuevo amigo de nombre el “tomate verde”, y el tomatito pensó “¡Qué bien me lo voy a pasar ahora, ja, ja, ja¡”, pero cuando llegó el tomate verde, el tomatito travieso tuvo celos de él, porque era el centro de atención.
Al día siguiente el tomatito travieso llevó al tomate verde al bosque, para que se perdiera y no volviera, pero en el camino el tomatito se dio cuenta de que el tomatito verde era igual que él e inmediatamente cambió de opinión.
Entonces le pidió perdón y se fueron los dos juntos a la cesta con los otros tomates hicieron una fiesta y se divirtieron muchísimo juntos ¡jupiiii¡.
Fin
Autora: Alba de Paz Jiménez
1º A
EL HADA DURMIENTE
Érase una vez un hada que paseaba por todas las noches y a los niños que no podían dormir les contaba un cuento, por eso la llamaban el “hada durmiente”.
Era muy buena y muy guapa y contaba cuentos muy bonitos, mágicos, llenos de hadas, cuentos que hacían llorar de alegría y reír a los niños que no podían dormirse.
Un día se encontró a un niño llorando acostado en su cama y muy arropado. El hada durmiente le preguntó “¿qué te pasa?”. Pero el niño no quería hablar. El hada le preguntó otra vez ¿Qué te pasa? , entonces el niño le dijo “Tengo mucho miedo”, y el hada le respondió “no tienes por qué tener miedo, existen un montón de cuentos muy bonitos y alegres, y el niño dijo ¡Ah, siii¡. El hada le dijo quieres que te cuente uno y el niño le respondió “¡siiiii¡ con mucha alegría; entonces el hada le contó un bonito cuento de una bailarina que ayudaba a los niños que tenían miedo.
Al niño le encantó, rió y después le entró mucho sueño y se durmió. Pero al día siguiente el niño no quería dormir para que el hada volviera.
Entonces el hada fue y le preguntó ”¿Qué te pasa?¿Por qué no te quieres dormir?” y él le respondió “no me duermo, porque quiero que me leas un cuento de los tuyos”. Entonces le contó un cuento: que se titulaba: “el niño dormilón”, que trataba sobre canciones que te hacían dormir, y poquito a poquito el niño se durmió, entonces el hada se fue.
Al día siguiente el niño tampoco quería dormirse para que el hada volviera a contarle otro cuento, pero esa noche el hada se hirió un ala y no pudo ir, volvió al día siguiente en cuanto se le curó el ala, pero se encontró al niño dormido, entonces le dejó una figurita de un hada con una nota que decía, que cuando quisiera que volviera le acariciara la cabeza, también le dejó muchos cuentos bonitos para que se los leyeran sus padres para que así ella pudiera seguir ayudando a otros niños que la necesitasen.
FIN
3º premio
Autora: Soraya Dual
1ºA. IES La Coma
El CASTILLO ABANDONADO
Érase una vez en la cima de una gran montaña rodeada de un gran bosque había un gran castillo abandonado, donde había ratones y hadas mágicas.
Un día un extraño caballero muy guapo y joven llamado Ángel estaba paseando por el bosque, buscando un lugar donde descansar.
Tenía una perrita que se llamaba Mini, que tenía muy buen olfato. Encontraron el gran castillo abandonado.
El príncipe Ángel entró en el castillo y la perrita se fue hacia arriba del castillo y empezó a arañar la puerta de una habitación llena de cerraduras y candados.
El príncipe subió a buscar a su perrita y vio la gran puerta, que estaba cerrada, intentó abrirla pero no pudo y empezó a gritar“ ¿Hay alguien ahí?”, entonces contestó una chica “sí, estoy aquí, ¿puedes buscar la llave?”; entonces su perrita Mini bajó a buscar la llave de la habitación donde estaba encerrada la chica, Mini la encontró olfateando, subió la llave y se la dio al príncipe Ángel, éste abrió la puerta y una chica muy guapa salió muy contenta de la habitación y se abrazó al príncipe y a la perrita.
La chica le preguntó ¿Cómo te llamas?” “yo me llamo Sara, princesa Sara, gracias por rescatarme”. Estuvieron hablando durante mucho tiempo y al final la princesa le dijo “Te quiero, ¿quieres vivir conmigo en el castillo?”. El príncipe que se había enamorado nada más verla aceptó y vivieron felices en el castillo junto a su perrita Mini.
Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)